martes, 22 de marzo de 2011

Grazna en rotos padecidos.

Talla en madera 95x25 cm. roble.

No hay guerra justificada en el padecimiento y muerte de la ética. El mundo tiene que orquestar el razonamiento con las armas de las palabras. Abajo la guerra, arriba la revolución comprometida con la justicia.

GRAZNA EN ROTOS PADECIDOS
El trasfondo de esa vivaz mirada asomada,
deseaba volar calladamente en el recuerdo.
Colapsó el determinismo
en la nota alta del silbido,
se grazna en rotos padecidos.
No sé si la transitoriedad llega
o es la perdición de la razón
con el glosario de su desprendimiento.
No era ver,
lo que se veía,
ni tampoco probar
que fuese realidad,
escuchaba el lamento
de un gato con mil años vividos
en noches de blasfemias sembradas
con respiraciones y secretos.

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