
Un acción letrada
entre un paisaje
caminado en la
música notada
en escalones
y pintura
de reverente sol.
La rama se volvió a contraer
en su contrariedad contraria
cuando el sol contrajo
las sombras a la nada,
las sombras a la nada,
en el diáfano paisaje lleno
de visibilidad horizontal.
Gestos de aire rocoso,
representación
en la mímica fluctuante,
dedos tejidos
en el volumen sonoro
en la grupa de José Manuel,
yedra atenuada
en libreto que mueve
la pausa del silencio;
musicalidad de una tarde oída
en el blanco
de un lienzo sangrante.
rojo batiéndose
con el azul
en el expansivo verde
lleno de luz amarillo,
contrayendose en el tiempo marcado
de fuga retirada.
Manos de pincel,
brazos veleta,
giros pintados
en lo nuevo creado.
Fue la época
en las cavernas abstractas
de Luis Berruti.
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